29 junio 2014

Las 100 películas favoritas de Hollywood (que no las mejores)

Hollywood ha hablado y elegido sus 100 películas favoritas. Más de 2.100 productores, directores, agentes, etc. han seleccionado sus películas preferidas, y, como siempre, los comentarios no han tardado en llenar la red. Puesto que no es una lista de ‘mejores películas’, creo que toda crítica está fuera de lugar, pero sin duda es interesante comentar el resultado, ya que es una buena representación de los intereses actuales del séptimo arte. Veamos primero el listado completo, que he traducido y completado (añadiendo los directores) a partir de la publicación en la revista original ‘Hollywood Reporter’:

#1 El Padrino
La película más querida
1. El Padrino
(Francis Ford Coppola, 1972)
2. El mago de Oz 
(Víctor Fleming, 1939)
3. Ciudadano Kane 
(Orson Welles, 1941)
4. Cadena perpetua 
(Frank Darabont, 1994)
5. Pulp Fiction 
(Quentin Tarantino, 1994)
6. Casablanca 
(Michael Curtiz, 1942)

27 junio 2014

'Mi otro yo': Isabel Coixet tropieza con el cine de terror

Sophie Turner en 'Mi otro yo' (Isabel Coixet, 2013)
La directora juega con cristales y espejos para
explorar el alma desdoblada de la protagonista
Hace años que Isabel Coixet no nos ofrece una de sus grandes películas. De hecho, la envolvente La vida secreta de las palabras (2005), que obtuvo cuatro premios Goya (película, director, guión original y diseño de producción, yendo los tres primeros a manos de la propia Coixet), es su último gran largometraje. Desde entonces, la directora ha participado en algunos documentales de interés —de hecho, tanto el episódico Invisibles (2007, codirigido con Wim Wenders, Fernando León de Aranoa, Mariano Barroso y Javier Corcuera) como el polémico Escuchando al juez Garzón (2011) le han granjeado merecidos premios Goya—, pero sus producciones de ficción (Elegy, 2008; Mapa de los sonidos de Tokio, 2009; y Ayer no termina nunca, 2013) no han conquistado ni a la crítica ni al público.

23 junio 2014

'El crepúsculo de los dioses', película clásica con mayúsculas

El crepúsculo de los dioses es una gran película sobre el mundo de las grandes películas. O, mejor dicho, sobre el triste ocaso de las mismas. “Yo soy grande; son las películas las que se han hecho pequeñas”, brama la actriz en decadencia Norma Desmond en uno de los muchos grandes momentos de esta obra a la que hoy he decidido dedicar el blog tras disfrutar de un segundo visionado que me ha enamorado de ella.

Gloria Swanson en 'El crepúsculo de los dioses' (Billy Wilder, 1950)
Gloria Swanson era consciente de que el personaje
de Norma Desmond tenía mucho en común con ella
El crepúsculo de los dioses supone la octava película del gran Billy Wilder, quien, allá en 1950 (fecha de estreno de la obra), ya nos había regalado obras maestras como el clásico de cine negro Perdición (1944) y la impactante versión del alcoholismo Días sin huella (1945). Las películas más famosas del cineasta —Sabrina (1954), La tentación vive arriba (1955), Testigo de cargo (1957), Con faldas y a lo loco (1959) y El apartamento (1960)— aún tardarían años en llegar, pero El crepúsculo de los dioses no tiene nada que envidiar a ninguna de ellas.

01 junio 2014

Las 50 mejores canciones Disney (películas de animación)

El gran éxito de “Let it go”, de la película Frozen, ha devuelto a las canciones Disney la magia y popularidad. Desde 1937 con Blancanieves y los siete enanitos, prácticamente no ha habido un film del estudio sin un par de canciones que recordar y éste ha acumulado ocho merecidos premios Óscar a mejor canción. Como fan de todas ellas, hoy he decidido dedicar un artículo a las 50 mejores.

El rey león (Rob Minkoff y Roger Allers, 1994)
El rey león fue el primer film con tres canciones
nominadas al Oscar, todas de Tim Rice y Elton John
50. “Les aristocats”, de Los aristogatos (Wolfgang Reitherman, 1970). Maurice Chevalier aporta su refinado estilo francés a esta agradable canción que da comienzo al primer film estrenado tras la muerte de Walt Disney.

49. “The unbirthday song”, de Alicia en el País de las Maravillas (Clyde Geronimi, Hamilton Luske y Wilfred Jackson, 1951). Todo un clásico, esta divertida canción tiene la ventaja de poder cantarse (casi) todos los días del año con carácter festivo.