29 agosto 2013

'Jurassic Park' y otras películas de dinosaurios

Parque Jurásico (Jurassic Park)
Los dinosaurios de Jurassic Park fueron los primeros
en causar auténtico terror en los espectadores
El re-estreno de la película Parque Jurásico (Jurassic Park) con tecnología 3D ha causado gran emoción entre sus múltiples fans, tanto entre quienes ya la disfrutaron en su estreno como por aquéllos que nunca han podido verla en la gran pantalla. Y no es para menos. Jurassic Park es una de esas películas especiales que marcan un antes y un después en la historia del cine. Concretamente, un antes y un después en las películas de dinosaurios. Por tanto, además de hablar de este clásico de los blockbusters, hoy voy a dedicar el blog a las apariciones más memorables de estas fascinantes criaturas en el séptimo arte.

La pionera a este respecto fue El mundo perdido (Harry O. Hayt, 1925), adaptación de la novela de Sir Arthut Conan Doyle sobre una expedición científica británica a la selva brasileña que resulta estar llena de hombres prehistóricos y dinosaurios. Los efectos especiales corrieron a cargo de Willis H. O´Brien, pionero de la animación en el cine, quien creó a los dinosaurios a partir de figuras de goma con estructuras metálicas que se movían unos milímetros en cada fotograma. Por supuesto, la película está hoy en día desfasada, pero supuso un gran logro en su tiempo.

King Kong (Merian C. Cooper y Ernest B.  Schoedsack, 1933)
King Kong vive en una isla al margen de la evolución
donde los dinosaurios prosperan... y atacan
La calidad del resultado llevó a los productores de King Kong (Merian C. Cooper y Ernest B.  Schoedsack, 1933) a recurrir a O´Brien para que creara los dinosaurios de la que sería una de las películas más influyentes en el cine de efectos especiales de todos los tiempos. Esta vez, O´Brien se inspiró en ilustraciones de Charles R. Knight y animó sus creaciones con la técnica del stop-motion superando con creces el resultado de 1925. Por desgracia, la ausencia de una categoría de los Oscar a mejores efectos visuales hizo que su trabajo no quedara reconocido.

Dicho premio fue constituido en 1939 y, al año siguiente, contó entre sus nominadas con Hace un millón de años (Hal Roach y Hal Roach Jr., 1940), también contendiente en la categoría de banda sonora. Pese a que D. W. Griffith, productor del mismo, pidió que su nombre fuera eliminado de los créditos a causa de su descontento, el film fue todo un éxito de taquilla gracias a unos efectos especiales de gran calidad para la época. De hecho, varios films posteriores recurrieron a imágenes de esta película.

Viaje al centro de la Tierra (Henry Levin, 1959)
El centro de la Tierra contiene
dinosaurios y mucho más
Ya que los grandes estudios no estaban demasiado interesados en estas criaturas, quizá por la dificultad de crearlos de una forma decentemente realista, la mayoría de producciones con esta temática eran de bajo presupuesto. Entre las más entretenidas encontramos El continente perdido (Sam Newfield, 1951), El monstruo de los tiempos remotos (Eugène Lourié, 1953) y Tierra desconocida (Virgil Vogel, 1957), cuyos dinosaurios incitaban a menudo más a la risa que a la fascinación. Superior a todas ellas fue la imaginativa Viaje al centro de la Tierra (Henry Levin, 1959), pero, claro, ésta contaba con la 20th Century Fox como productora y con la novela de Julio Verne como base. La cinta obtuvo tres merecidas nominaciones a los Oscar en las categorías de dirección artística, efectos especiales y sonido, pero perdió todas ellas ante la imbatible Ben-Hur, de William Wyler.

Godzilla, Japón bajo el terror del monstruo (Ishirô Honda, 1954)
Godzilla, metáfora de la bomba atómica, se convirtió
en un querido personaje de la cultura popular
Mientras tanto, al otro lado del Océano se creaba uno de los mayores éxitos del cine japonés: Godzilla, Japón bajo el terror del monstruo (Ishirô Honda, 1954), donde, tras barajarse apariencias de pulpo gigante y simio, se terminó optando por una mezcla de tiranosaurio, estegosaurio e iguanodon que, en realidad, simbolizaba la bomba atómica. En esta ocasión, era un actor (Haruo Nakajimi) quien se introducía en el disfraz del monstruo. Además de obtener el premio de mejores efectos visuales y una nominación en la categoría de mejor película de la Academia de cine japonesa (que perdió ante Los siete samuráis, de Akira Kurosawa), la película dio lugar a veintisiete mediocres secuelas –varias incluso dirigidas por Honda, como King Kong contra Godzilla (1962) y Godzilla contra los monstruos (1964)– y una infinitud de parodias y homenajes, con lo que, si bien su calidad es discutible, su legado no lo es.

Viaje a la prehistoria (Karel Zeman y Fred Ladd, 1955)
La checoslovaca Viaje a la prehistoria es la película
clásica de dinosaurios más sorprendente
Al margen de EE.UU. también hay que destacar a la checoslovaca Viaje a la prehistoria (Karel Zeman y Fred Ladd, 1955), que combina maquetas, stop-motion, acción real, dibujos animados y escenografía para obtener unos resultados realmente fascinantes. Además, el fantástico viaje de cuatro niños a través de la Prehistoria (desde los mamuts de la Edad de Piedra hasta los trilobites del Paleozoico, pasando, por supuesto, por todo tipo de dinosaurios de los periodos Triásico, Jurásico y Cretácico) resulta entretenido e instructivo a partes iguales.

Hace un millón de años (Don Chaffey, 1966)
El vestuario de Hace un millón de años
contentó a los fans de Raquel Welch
Enormemente popular fue el remake de Hace un millón de años dirigido por Don Chaffey en 1966, que se convirtió en el mayor éxito de taquilla de la historia de la productora británica Hammer gracias, sin duda, al protagonismo de una sugerente Raquel Welch corriendo entre terribles dinosaurios. De hecho, una de las frases promocionales rezaba: “Conozca un mundo bestial donde la única ley es ¡la lujuria!”. Los exteriores fueron rodados en las Islas Canarias y, aunque la convivencia de cavernícolas y dinosaurios no tiene precisamente rigor científico, se decidió que los personajes no hablasen y se limiten a emitir gruñidos para alcanzar mayor realismo. La creación de los dinosaurios es bastante impresionante gracias a la colaboración de Ray Harryhausen, pupilo de Willis O´Brien, pero los efectos sonoros son muy mejorables y la idea de combinar las criaturas mecánicas con imágenes reales de iguanas y arañas ampliadas resulta, como poco, irrisoria.

Mientras la Hammer se copiaba a sí misma en la popular aunque mediocre Cuando los dinosaurios dominaban la Tierra (Val Guest, 1970), con una Victoria Vetri que no logra hacernos olvidar a Welch, El valle de Gwangi (Jim O´Connolly, 1969) surgía para el lucimiento de los fascinantes efectos especiales de Ray Harryhausen, los cuales servirían de influencia para la mismísima Jurassic Park. No obstante, la falta de apoyo popular de cintas como La tierra olvidada por el tiempo (Kevin Connor, 1975) y El planeta de los dinosaurios (James K. Shea, 1978) demostró que ya no bastaban grandes dinosaurios para atraer a los espectadores a películas mediocres. Como parodia de todas ellas surgió la cutremente divertida Cavernícola (Carl Gottlieb, 1982), protagonizada por el Beattle Ringo Starr, sobre la lucha entre dos bandos de hombres prehistóricos: los fuertes contra los desahuciados, que incluyen una pareja homosexual, un ciego, un negro y un enano.

En busca del valle encantado
En busca del valle encantado fue criticada por privar a
los dinosaurios del interés al hacerlos tan pequeños
Curiosamente, tuvo que llegar el final de los ochenta para que los dinosaurios llamaran la atención del cine de animación. Y eso que uno de los pioneros de este arte fue el cortometraje Gertie the Dinosaur (Winsor McCay, 1914), donde un simpático dinosaurio cobraba vida con gran sensibilidad para le reducida técnica de la época. En busca del valle encantado se presentó en el Festival de Annecy de 1988 y contaba las aventuras de cinco jóvenes dinosaurios: el “cuellilarlo” (apatosaurio) Piecito, la “tres-cuernos” (triceratops) Sera, el volador (pterosaurio) Petri, el “nadador” (saurolofo) Patito y el “cola-de-puás” (escelidosaurio) Púas. Se trataba del nuevo trabajo de Don Bluth, destacado director de cine animado fantástico que ya nos había sorprendido con Nimh, el mundo secreto de la Sra. Brisby (1982) y más adelante crearía clásicos como Anastasia (1997) y contaba con George Lucas y Steven Spielberg como productores ejecutivos. Aunque la película no tuvo gran éxito en su día, sus constantes reposiciones en televisión la convirtieron en un clásico para todos los niños de los noventa, quienes aprendían con ella valores como la amistad, el valor, la generosidad y la superación de los miedos.

El éxito fue tal que se crearon hasta doce secuelas y, si bien las tres primeras presentaban un resultado bastante decente y muy entretenido para los más pequeños de la casa gracias a la dirección de Roy Allen Smith (Aventuras en el gran valle, 1994; La fuente de la vida, 1995; y Viaje a la tierra de las brumas, 1996), desde que Charles Grosvenor tomó la dirección en La isla misteriosa (1997) los resultados fueron de mal en peor, con la única excepción del capítulo X, El viaje de Cuellilargos (2003), que lograba humanizar a los protagonistas y dar un sentido a sus vidas más allá de deambular de aquí para allá. Solo los problemas económicos llevaron a Universal Animation Studios a poner fin a la interminable saga.

Parque Jurásico (Jurassic Park) (1993)
Aunque Jurassic Park emplea tecnología digital,
tiene como base figuras mecánicas reales
Si algo logró En busca del valle encantado fue terminar con la imagen de los dinosaurios como monstruos. Esto mismo es lo que quería Spielberg para su Parque Jurásico (Jurassic Park) (1993), donde los dinosaurios, aunque enormes y temibles, serían por primera vez presentados como animales con un comportamiento creíble, para lo que se recurrió al consejo del paleontólogo Jack Horner. Así, los tiranosaurios y los velociraptores desean, como cualquier carnívoro, encontrar carne para alimentarse, pero no son por ello crueles monstruos. En contraposición, están los brachiosaurios, que protagonizan una escena bastante poética en la que los protagonistas oyen sus cantos en la noche; la triceratops herida, que muestra el lado más “humano” de estas criaturas; y los ágiles y vulnerables gallimimus, que dan lugar a la escena más memorable y potente del film al huir del gigantesco tiranosaurios. La sexta y última especie de dinosaurio (la novela original de Michael Crichton hablaba de quince especies, pero se prefirió concentrar los esfuerzos en unos pocos) era un sorprendente dilofosaurio. Los paleontólogos interpretados por Sam Neill y Laura Dern son, junto a los niños Joseph Mazzello y Ariana Richards, los héroes de la historia y, gracias a sus sencillas pero bien dirigidas interpretaciones, nuestra identificación con ellos es absoluta.

El mundo perdido: Jurassic Park (1997)
Steven Spielberg dirigió las dos primeras entregas
de Jurassic Park con gran ojo comercial
Aunque, claro, los auténticos protagonistas son los dinosaurios, los cuales alcanzaron aquí un grado de realismo que aún no ha sido siquiera igualado. El resultado fue fruto de la colaboración de Stan Winston, creador de modelos robóticos; Dennis Muren, encargado de la composición digital en representación de Industrial Light & Magic; Philn Tippett, experto en la técnica go-motion (similar al stop-motion pero con los modelos en ligero movimiento), y Michael Lantieri, supervisor de los efectos escenográficos. Los cuatro compartieron uno de los Oscars a mejores efectos visuales más merecidos de la historia y, aunque la película solo fue nominada en dos apartados más (sonido y efectos sonoros), terminó obteniendo las tres estatuillas con pleno merecimiento. Sin duda influyó en la escasez de nominaciones el hecho de que ése fuera el año de otra obra maestra de Spielberg: La lista de Schindler. Dicha película granjeó a John Williams un merecido Oscar y explica que su memorable trabajo para Jurassic Park fuera tristemente ignorado.

Jurassic Park III (Joe Johnston, 2001)
El spinosaurio de Jurassic Park III hizo que los
 tiranosaurios parecieran amigables
La película se convirtió en la decimoctava película más taquillera de la historia, con lo que sus productores y director no tardaron en crear una secuela titulada El mundo perdido: Jurassic Park (1997) donde la violencia y el efectismo sobrepasaban con creces a la anterior. No puedo decir lo mismo de la calidad y, de hecho, la película obtuvo tres merecidas nominaciones a los premios Razzie: peor guión, peor secuela y peor “temerario desprecio para la vida humana y propiedad pública”. Ni siquiera los efectos especiales, nominados al Oscar, superaban a los de su predecesora. Ya sin Spielberg ni Williams (aunque no sin el tema principal de éste) surgió Jurassic Park III (Joe Johnston, 2001) y, aunque incluía la novedad del spinosaurio como dinosaurio principal y ahondaba en interesantes teorías científicas, no se libró de ser de nuevo nominada al Razzie a peor secuela. Una cuarta secuela titulada Jurassic World, dirigida por Colin Trevorrow y protagonizada por Samuel L. Jackson y la pareja original (Neill y Dern) está prevista para 2015 y el secretismo de su producción tiene en ascuas a millones de fans.

King Kong (2005) de Peter Jackson
Naomi Watts valora sus opciones en King Kong
Por cuestionable que sea la calidad de esta saga, lo innegable es que cuenta con los dinosaurios más realistas e impresionantes que ha creado el cine. Ni siquiera las criaturas prehistóricas del King Kong (2005) de Peter Jackson, que, curiosamente, fue premiada exactamente con los mismos tres Oscars que Jurassic Park, superan a aquellas en realismo, aunque en este caso es comprensible que los principales esfuerzos se concedieran al protagonista indiscutible de la misma. De todos modos, esta película presenta a los dinosaurios como criaturas malvadas y estúpidas que protagonizan algunos de los momentos más bochornosos del film (aunque, hay que admitirlo, también algunas de las más impresionantes).

Dinosaurio (Ralph Zondag y Eric Leighton, 2000)
Dinosaurio utiliza la animación para crear
dinosaurios tan creíbles como adorables
El hecho de que estos dinosaurios fueran creados por completo de forma digital sin duda entorpece su realismo, ya que la combinación de criaturas mecánicas y efectos digitales suele dar un resultado más natural. Como pionera en la mezcla de animación digital e imágenes reales hay que señalar el clásico Disney Dinosaurio (Ralph Zondag y Eric Leighton, 2000), que contaba la historia de un iguanodon adoptado por una familia de lémures (sí, el rigor científico por los suelos, ya que ambas especies jamás convivieron en el tiempo) que se une a una gran manada de dinosaurios en la búsqueda de un nuevo lugar donde vivir tras la caída de una devastadora lluvia de meteoritos. Aunque la historia no es demasiado original, el realismo de la animación (algo enturbiada por el hecho de que los dinosaurios hablen, pero aún así impresionante) y la brillantez del diseño de personajes (tiernos protagonistas y temibles antagonistas) conforman uno de los mejores films de dinosaurios que ha dado el cine.

Eso sí, para los más pequeños de la casa la mejor opción es sin duda la simpática e inofensiva Rex, un dinosaurio en Nueva York (Simon Wells, Phil Nibbelink, Dick Zondag y Ralph Zondag, 1993), ya que Ice Age 3: el origen de los dinosaurios (Carlos Saldanha y Mike Thurmeier, 2009) deja bastante que desear. Y, aunque recibió críticas bastante negativas, la miniserie Dinotopía (Marco Brambilla, 2002), un mundo fantástico construido sobre la base del respeto mutuo entre humanos y dinosaurios, resulta bastante entretenida y bien realizada, con efectos especiales ganadores del Emmy. Y, al otro lado de la moneda, encontramos la irregular Proyecto dinosaurio (Sid Bennett, 2012), que, en la línea de El proyecto de la Bruja de Blair (Daniel Myrick y Eduardo Sánchez, 1999) nos hace creer que se trata de una grabación encontrada que realmente tuvo lugar. Todo sea por rodearse de misticismo prehistórico.

El árbol de la vida (Terrence Malick, 2011)
Los dinosaurios de El árbol de la vida son clave,
aunque no lo parezca
Han pasado 65 millones de años desde la extinción de los últimos dinosaurios y el ser humano sigue fascinado por estas criaturas que han alcanzado un estatus de leyenda confirmada por la ciencia. La vida y extinción de los dinosaurios siguen siendo un emocionante misterio, uno de los detalles que convierten a la existencia y el universo en una envolvente poesía. Muchos se sorprendieron al ver dinosaurios en la extraña El árbol de la vida (Terrence Malick, 2011). Yo no. Los dinosaurios representan el pasado y los misterios de la vida, representan unos tiempos de los que sabemos muy poco y, lo que es más importante, de los que nunca podremos saberlo todo. El ser humano está condenado a vivir desconociendo qué hace aquí y cuál es su propósito. Los dinosaurios reflejan esa situación de incertidumbre que tanto detesta Rex en Toy Story 3 (Lee Unkrich, 2010), nos recuerdan que, por mucho que intentemos jugar a ser Dios, siempre habrá una parte del universo que se nos escapa, siempre habrá algo que no sabemos y nos inste a investigar. Y, ¿no es eso lo más hermoso de estar vivo?


© El copyright del texto pertenece exclusivamente a Juan Roures
© El copyright de las imágenes pertenece a sus respectivos autores y/o productoras/distribuidoras

16 comentarios:

  1. Sin lugar a dudas, mi dinosaurio favorito es Rex!
    Una miniserie de documentales que me impresionó mucho en su momento fue la de Caminando entre Dinosaurios.
    Sin duda son unas criaturas fabulosas que seguirán llamando nuestra atención durante muchísimo tiempo ya que en realidad sabemos muy poco de ellos (hay teorías que sugieren que tuvieron plumas, who knows?)

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    1. No incluí la serie por no ser cine de ficción, pero sin duda Caminando entre dinosaurios es una de las mejores obras audiovisuales a este respecto! Imprescindible para dinofanáticos :)

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  2. Es muy interesante esta labor de investigación, a tener en cuenta por todos nosotros, en el momento en que llega a los cines el film de Spielberg en versión 3D, y es además bonita la tarea de reconstrucción poética de estos 'bichos' inmensos que han fascinado al hombre desde que se tiene noticia de su existencia. Te felicito por estos trabajos.

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    1. Muchas gracias! Me alegra que te haya gustado. Para mí era un tema muy especial, porque los dinosaurios me apasionan y algunas de las películas del artículo (Jurassic Park, En busca del valle encantado, Dinosaurio...) marcaron mis comienzos en el séptimo arte!

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  3. Qué buen trabajo de investigación Juan, recuerdo las veces que vi En busca del valle encantado, como me gustaban las aventuras de Piecito y sus amigos. Después llegó Spielberg y se desató la dinomanía. A ver que nos depara la cuarta entrega, porque las dos anteriores fueron algo decepcionantes, sobre todo la última. Gracias por la explicación de porqué aparecen los dinosaurios en El árbol de la vida, yo era una de las personas que se preguntaba que qué pintaba esa secuencia en medio de la trama familiar :D

    Saludos!!

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    1. Muchas gracias! Para mí Piecito y compañía son únicos como entretenimiento infantil, aunque lo cierto es que cada entrega era algo peor que la anterior! Yo espero impaciente la cuarta entrega de Jurassic Park, aunque no sé qué esperar. Y me alegro de haber aclarado El árbol de la vida! ;)

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  4. Me encantan tus post, tan cuidados, tan meticulosos... enhorabuena.

    Yo en su día fui al cine a ver Jurassic Park y quedé fascinado por aquel espectáculo y aquellos bichetes tan cabronías. De pequeño me daban repelús y las lagartijas eran poco menos que enviadas del demonio, jejejeje.

    Un saludo.

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    1. Muchísimas gracias!! Me alegro :) a mí las películas de dinosaurios me gustan, pero echo en falta más obras maestras al respecto. Un saludo.

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  5. Buenos días Juan,

    Me gustan mucho tus post. Escribes muy bien y me encanta leerte.

    Yo en su día me negué totalmente a ver la película. Años más tarde le di una oportunidad y la vi. No me entusiasmó, ni me transmitió nada.

    Un saludo y que tengas un buen día!

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    1. Muchísimas gracias!! Me alegro (de que te guste el blog, no de que te disguste Jurassik Park jeje) :) Un saludo

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  6. Nunca me gustaron mucho las pelis de dinosaurios, pero hasta me dieron ganas de ver alguna otra!!!

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  7. excelente post!!! mis favoritas son sin duda en aquellas que estuvo implicado el gran maestro Harryhausen, quien supo darles una personalidad mas que definida a sus criaturas prehistoricas como Gwangi, el redhosaurus o el allosaurus de 1 miilon de años antes de Cristo.

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    1. Gracias! Sin duda Harryhausen es una figura clave en el cine de dinosaurios. Con pocos medios, hizo mucho!

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  8. Fan de Jurassic Park desde que tengo memoria, no sabía que hubiera tantas películas de dinosaurios a lo largo de la historia del cine :0 sólo conocía El Mundo Perdido, Cuando los Dinosaurios Reinaban la Tierra, y Cavernícola; trataré de ver las demás.
    ¡Gracias por la lista! Saludos

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    1. Pues sí, hay muchísimas, aunque por desgracia no demasiadas son buenas... Pero vale la pena echar un vistazo mientras nos preparamos para Jurassik Park 4! ;)

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