Mejores villanos Disney

Las películas Disney no están exentas de críticas, pero pocos pueden rememorar su infancia sin ellas. Entre los muchos méritos de estos clásicos animados está la creación de villanos tan humanos como intrigantes, tan divertidos como aterradores, esenciales para que los héroes den muestra de su generosidad, valentía y buenos valores. Como fan eterno de estas películas de animación (a las que dediqué en su día el artículo “Siempre magia Disney”) y, por supuesto, de sus villanos, he decidido celebrar el estreno de Al encuentro de Mr. Banks, de John Lee Hancock, donde Tom Hanks encarna al mismo Walt Disney, con un alegre y distendido (aunque no carente de interesante simbolismo) ranking de los trece mejores malvados animados de esta factoría de sueños.

John Silver se convierte en una sorprendente
referencia paternal para el héroe Jim Hawkins

13. John Silver, de El planeta del tesoro (Ron Clements y John Musker, 2002). Voz original: Brian Murray. Aunque, al igual que la infravalorada película, John Silver no está entre los personajes más recordados, su importancia radica en ser el villano más humano de la factoría. Y no por su física, ya que es un ciborg (mitad humano, mitad máquina), sino por su profunda identidad. Obsesionado con encontrar un gran tesoro, Silver consigue pasar desapercibido como cocinero del barco dirigido por la capitana Amelie y, junto al adorable Morfo, desarrolla su traicionero y egoísta plan. Sin embargo, al conocer al joven Jim Hawkins, abandonado por su padre cuando era solo un niño, Silver no puede evitar enternecerse y embriagarse de un espíritu paternal muy humano que lo convierte en el villano más contradictorio, sorprendente y empático de todos los del estudio.

Shere Khan es sigilosamente aterrador

12. Shere Khan, de El libro de la selva (Wolfgang Reitherman, 1967). Voz original: George Sanders. Inspirado en la siniestra elegancia del oscarizado actor de Eva al desnudo (Joseph L. Mankiewicz, 1950) George Sanders, quien también pone su refinada y cínica voz al personaje, el tigre Shere Khan es uno de los villanos más temibles en parte debido a su tardía entrada en escena: durante la mitad de la película, su mero nombre es símbolo de terror, lo que convierte su sinuosa aparición entre las altas hierbas de la selva en un momento tan esperado como temido. No obstante, hasta el ser más temible teme por algo y, en el caso de Shere Kahn se trata del fuego, que lo atrae y repele a partes iguales precisamente porque, al no conocerlo bien, es lo único que no controla, todo un símbolo del poder que el ser humano tiene sobre la naturaleza.

No contenta con ordenar la muerte de su hijastra,
la cruel Reina Grimhilde pide su corazón

11. Reina Grimhilde (madrastra), de Blancanieves y los siete enanitos (David Hand, 1937). Voz original: Lucille La Verne. Con silueta de Greta Garbo y pómulos de Joan Crawford, la reina Grimhilde (mejor conocida como “la madrastra”) resultó tan terrorífica en su día que muchos consideraron que este adorable film infantil era poco apropiado para los niños. No obstante, lo mejor es que nos acostumbremos a los horrores del mundo desde pequeños, ¿no creéis? La codiciosa madrastra de Blancanieves ordena sin pesar el asesinato de ésta por arrebatarle su posición como “la más hermosa del reino”, pero, paradójicamente, termina disfrazándose de horrible anciana para hacer realidad su malvado plan. Aunque se trata de una de las villanas más aterradoras y menos empáticas de la factoría Disney, era aún más terrible en el cuento original de los hermanos Grimm, donde no era una mera madrastra… ¡si no la propia madre de Blancanieves! De todos modos, se trata de un buen ejemplo del villano de los primeros años del estudio: cruel, oscuro, inhumano y carente de atractivo. Por cierto, su manzana roja es, además de un icono, el símbolo del pecado. Hace dos años, disfrutamos de cuatro versiones de carne y hueso de esta villana: Julia Roberts en Mirror, Mirror (Tarsem Singh), Charlize Theron en Blancanieves y la leyenda del cazador (Rupert Sanders), Marivel Verdú en Blancanieves (Pablo Berger) y Lana Parrilla en la serie Érase una vez, todas ellas más humanas pero menos aterradoras que la versión original. (Más al respecto en el artículo “Las cuatro Blancanieves del 2012”.)

La maldad de la Madre Gothel supone un duro golpe
para la heroína Rapunzul, quien cree que es su madre

10. Madre Gothel, de Enredados (Nathan Greno y Byron Howard, 2010). Voz original: Donna Murphy. En contraposición a la oscura madrastra de Blancanieves, Madre Gothel presenta características muy humanas, sin ser por ello en absoluto menos malvada. De hecho, no tuvo reparos en raptar a la bella Rapunzel para beneficiarse de los poderes rejuvenecedores de su larga cabellera… ¡e incluso se hizo pasar por su madre! Malvada y manipuladora, se trata de la única villana Disney memorable de la etapa digital del estudio y presenta un extraño y divertido sentido del humor que contrasta con la sorprendente falta de escrúpulos de sus acciones. Su interpretación de la canción “Madre sabe más (Mother knows best)” refleja a la perfección su maldad camuflada de buenas intenciones maternales. De todos modos, sus pasiones son comprensibles: ¿quién no teme al paso del tiempo? Su escena final es pura poesía y muestra de la esperanza que este film supuso para el estudio.

El nombre de Scar significa "cicatriz" en inglés,
una referencia a la marca de su ojo izquierdo

9. Scar, de El rey león (Rob Minkoff y Roger Allers, 1994). Voz original: Jeremy Irons. Desde su primera escena, cuando vemos a Scar juguetear con un indefenso ratoncillo, comprendemos que nos encontramos ante un villano despiadado y carente de orgullo. Y es que este malvado pero astuto león es capaz de cualquier cosa por conseguir sus propósitos, desde engañar a su sobrino hasta asesinar a su propio hermano. Tal y como sucede en Hamlet, novela en que este brillante film se basa libremente (Scar es, por supuesto, Claudio), los celos y las ansias de poder son llevados al extremo. Eso sí, Scar también tiene sus momentos divertidos, sobre todo cuando lidia con el molesto Zazu o las atontadas y manipulables hienas, con las que protagoniza el hipnótico número musical “Preparaos (Be prepared)”, que incluye alusiones al mismísimo Hitler y la propaganda nazi.

Se dice que el Capitán Garfio
trabajaba para Barbanegra

8. Capitán Garfio, de Peter Pan (Clyde Geronimi, Hamilton Luske y Wilfred Jackson, 1953). Voz original: Hans Conried. El eterno enemigo del valeroso Peter Pan tiene sus propios problemas: tiempo atrás, un cocodrilo se tragó su mano izquierda… ¡y aparentemente el sabor fue tan delicioso que espera con ansia a devorarlo entero! Por suerte o por desgracia, el animal también se tragó un reloj de bolsillo cuyo tic-tac advierte al villano de su llegada. Este es un símbolo del miedo de Garfio al paso del tiempo, lo que acrecienta su desprecio y envidia por Peter Pan, que nunca envejece. Es tal su odio hacia él, que no tiene problema en engañar a Campanilla para que le traicione ni en sumirlo en la desesperación con sus inteligentemente malvadas palabras. En honor al hecho de que Hans Conried pusiera voz tanto al señor Darling como a Garfio, la película Peter Pan, la gran aventura (P. J. Hogan, 2003) dio ambos papeles a Jason Isaacs, al igual que suelen hacer las representaciones teatrales. Unos años antes, el propio Garfio tuvo su momento de gloria con Hook (el capitán Garfio) (Steven Spielberg, 1991), donde lo encarnó Dustin Hoffman, quien no estuvo a la altura del personaje animado.

La Reina de Corazones tiene
todo el reino a sus pies

7. Reina de Corazones, de Alicia en el País de las Maravillas (Clyde Geronimi, Hamilton Luske y Wilfred Jackson, 1959). Voz original: Verna Felton. Como la mayoría de personajes de esta irresistible adaptación del cuento de Lewis Carroll (la mejor realizada hasta ahora), la pomposa y mandona Reina de Corazones no atiende a razones. El problema es que el poder que posee sobre sus súbditos tiene serias consecuencias, y varias cartas son asesinadas por pintar las rosas de blanco en lugar de rojo por error. La propia Alicia es víctima de sus caprichos cuando debe enfrentarse a ella al croquet y descubre que incluso los mazos (flamencos) y las bolas (erizos) están obligados a que gane la reina… Eso sí, deben hacerlo sin que ella se dé cuenta o perderán la cabeza (literalmente). Más que malvada, la Reina de Corazones es caprichosa e inconsciente, con lo que protagoniza algunas de las escenas más absurdamente divertidas del film. Por cierto, la versión de Disney de este personaje es una combinación del personaje homónimo de la novela original y de la Reina Roja de la secuela A través del espejo (al igual que todo el film, de hecho). Helena Bonham Carter la encarnó con acierto en la fallida Alicia en el País de las Maravillas de Tim Burton de 2010.

El traje de Maléfica acentúa su maldad y poder

6. Maléfica, de La bella durmiente (Clyde Geronimi, 1959). Voz original: Eleanor Audley. Sin duda la malvada Disney con la presencia más impactante, la gótica Maléfica es fría, inteligente y muy poderosa, pero reduce sus aspiraciones a vengarse de la tontorrona Aurora, a la que maldice al nacer como castigo por no ser invitada a la celebración. De hecho, el principal problema de este film es que ni la protagonista ni su amado príncipe están a la altura de esta majestuosa villana, quien, a su vez, interactúa poco con el resto de personajes en su forma humana. Entre sus poderes mágicos, destaca la posibilidad de convertirse en dragón, algo impresionantemente aterrador… Y es que Maléfica es una de las pocas villanas que carecen por completo de comicidad, tal y como reflejan sus tenebrosos ambientes renacentistas, el cuervo que la acompaña (llamado Diablo o “Fiel amigo”) y la oscura banda sonora que la envuelve. En mayo se estrenará la película Maléfica (Robert Stromberg, 2014), protagonizada por Angelina Jolie, con lo que este aclamado personaje obtendrá por fin el reconocimiento que merece.

Cruela de Vil es una caricatura que puede verse como
una crítica al tabaco y el comercio de pieles

5. Cruela de Vil, de 101 dálmatas (Clyde Geronimi y Hamilton Luske, 1961). Voz original: Betty Lou Gerson. Inspirada en la temperamental actriz Talluah Bankhead, famosa por su ácida lengua, y con rasgos de la actriz sueca Viveca Lindfords, Cruela de Vil es la malvada humana por excelencia. Obsesionada con las pieles, hará lo posible por ampliar su armario con prendas blancas moteadas de negro (a juego con su cabellera, reflejo de su bipolaridad). Sin reparo alguno, rapta 99 cachorros dálmata junto a sus dos torpes secuaces, a los que martiriza con su mal humor y modales agresivos. Fumadora compulsiva, Cruela causa el terror allí donde va. La canción que el dueño de Pongo, Roger, compone sobre ella es muy clarificadora: “Cruela de Vil, Cruela de Vil, es todo un espanto, Cruela de Vil, la carne de gallina te pondrá…”. Glenn Close la encarnó en 101 dálmatas. ¡Más vivos que nunca! (Stephen Herek, 1996) y obtuvo por ello una merecida nominación al Globo de Oro a mejor actriz cómica.

Jafar cuenta con la dudosa ayuda del loro Iago

4. Jafar, de Aladdín (Ron Clements y John Musker, 1992). Voz original: Jonathan Freeman. Además de ser el clásico Disney mejor animado de la factoría, Aladdín es uno de los más queridos. La magia de este film no radica en la historia, sino en los personajes, pues todos ellos están confeccionados con sumo encanto. Y el villano no podría ser menos: Jafar es malvado y cruel, pero su ironía y astucia natas le permiten ganarse a los espectadores. El turbante, la capa y el báculo con forma de cobra (animal en el que él mismo termina convirtiéndose cuando la verdad sale a relucir) le dan una apariencia soberbia y grandiosa, que le permite engañar al atontado sultán para que le ofrezca la mano de su bella hija Jasmine. Al contrario que la mayoría de villanos de los prodigiosos noventa, Jafar apenas canta, baila o bromea, quizá para conservar su carácter impugnable. Su popularidad quedó de manifiesto cuando El retorno de Jafar (Toby Shelton, Tad Stones y Alan Zeslove, 1994) se convirtió en un éxito de ventas pese a su escasa calidad.

Yzma es la villana menos
atractiva del estudio

3. Yzma, de El emperador y sus locuras (Mark Dindal, 2000). Voz original: Eartha Kitt. Además de ser uno de los films más divertidos de Disney, la infravalorada El emperador y sus locuras cuenta con la villana más desternillante del estudio. Acompañada de su atontado secuaz Kronk (quien cinco años después protagonizaría El emperador y sus locuras 2: la gran aventura de Kronk, de Saul Andrew Blinkoff, Elliot M. Bour y Robin Steele), Izma decide poner fin al absurdo reinado del arrogante y egoísta emperador Cuzco y utilizar sus poderes para convertirlo en llama. Al principio, es fácil empatizar con ella, pues Cuzco no podría ser más insoportable, pero, poco a poco, éste aprende el valor de la generosidad y ella deja claro que el bienestar del reino no está entre sus prioridades. Aún así, el afinado guión, lleno de momentos con chispa, hace difícil desear mal alguno a esta fantástica (aunque horrenda) villana.

Al igual que todo el film Hades tiene poco que ver
con la mitología griega original

2. Hades, de Hércules (Ron Clements y John Musker, 1997). Voz original: James Woods. Como a la mayoría de los villanos, a Hades todo le sale mal… y las tres brujas del inframundo que-todo-lo-saben están ahí para recordárselo con sus molestos “ya lo sabemos”. Como Dios de los muertos y los infiernos, él es el enemigo de su hermano Zeus y su hijo Hércules (originalmente hijo de éste con Alcmena, pero el film prefiere ignorar el desliz y convertirlo en hijo de Hera) y, por algún motivo, no parece tener nada mejor que hacer que torturarlos. Decidido a obtener el poder del mundo a toda costa, Hades no pone límites a su maldad, pero la torpeza de sus secuaces Pena y Pánico y el fuego azul (rojo en momentos de enfado) de su cabeza, que tiende a apagarse en malos momentos, lo convierten en una divertida caricatura y, junto a la directa Meg, en el mejor personaje del film.

Úrsula es tan divertida que hasta sus acciones parecen
perdonables... hasta cierto punto

1. Úrsula, de La sirenita (Ron Clements y John Musker, 1989). Voz original: Pat Carroll. Moldeada a partir de los gestos de la Drag-Queen Divine, la malvada Úrsula es una cecaelia (mitad humana, mitad pulpo) y fue desarrollada por el estudio Disney a partir del plano personaje del cuento original de Hans Christian Andersen para que la maravillosa La sirenita tuviera una antagonista importante. Esta película supuso el renacer del estudio tras varios años de desaciertos gracias en gran parte a la inclusión de memorables canciones, entre las que se incluye la genial “Pobres almas en desgracia (Poor unfortunate souls)”, con la que la propia Úrsula expone sus intenciones (“Un par de veces ha pasado que el precio no han pagado y tuve que sus almas disolver…”) con una impagable mezcla de maldad y picardía. Hipnóticamente malvada y extravagantemente divertida, me atrevo a afirmar que Úrsula es la mejor villana del estudio Disney y una de las mejores antagonistas de la historia del cine.

Estos son, en mi opinión, los mejores villanos del estudio Disney. Algunos son divertidos y otros absolutamente temibles, pero todos han convertido su maldad en un elemento carismático y único de los fantásticos films que protagonizan… y algunos hasta han mostrado algún que otro rasgo con el que empatizar. Conviene destacar que no son siempre las mejores películas las que cuentan con los mejores villanos y que la pareja de directores formada por Ron Clements y John Musker (artífices de La sirenita, Aladdín, Hércules y El planeta de tesoro) es la que mayor partido ha sacado de los antagonistas de sus films (aunque en realidad son muchas personas las que hacen realidad cada una de estas producciones). La oposición entre los valores del bien y el mal es clave de estos films y, aunque son sus protagonistas quienes se ganan nuestro corazón, ninguno de estos tendría forma de mostrar su valía sin un malvado villano dispuesto a hacer todo lo posible por causar su mal… Extremadamente más poderosos e inteligentes que los héroes de estas historias, villanos como Úrsula, Jafar o Maléfica tienen un único elemento en su contra para triunfar: al final el bien siempre triunfa, al menos en el universo Disney.

© El copyright del texto pertenece exclusivamente a Juan Roures

© El copyright de las imágenes pertenece a sus respectivos autores y/o productoras/distribuidoras