10 noviembre 2014

LesGaiCineMad: buen cine lésbico, gay y transexual en la 19ª edición

El LesGaiCineMad es un festival hecho por y para la comunidad LGTB, que puede así disfrutar de obras audiovisuales que, por desgracia, no suelen llegar a la cartelera pese a reflejar una realidad tan importante como es la lucha por la propia identidad. Se trata también de una ocasión única para que los espectadores de cualquier identidad de género aprendan a ver la vida a través de los ojos de personas diferentes… y aprender a verlas como iguales. La 19ª edición de este certamen, uno de los más importantes del mundo sobre temática LGTB, ha sido rescatada por los colaboradores —desde los organizadores del evento hasta los contribuidores económicos, pasando por los voluntarios entre los que yo me encontraba—, ya que la crisis ha diezmado a los patrocinadores.

Reaching for the Moon (Flores raras) (Bruno Barreto, 2014)
Miranda Otto obtiene el protagonismo que
merece en la poética Reaching for the moon
De no celebrarse, habríamos perdido una de las ediciones más especiales que se recuerdan, con películas tan destacables como Anita’s Last Cha Cha, Girltrash: all night long, Helicopter Mom o Test. En una edición menos reñida, todas ellas habrían tenido posibilidades de cara al palmarés, finalmente dominado por tres notables títulos. Así, la nostálgica Tiger Orange, se ha alzado con los premios a Mejor Película y Mejor Actor para la estrella del porno Frankie Valenti —menciones excesivas pero no desacertadas—, mientras que la australiana 52 Tuesdays, ganadora del premio a Mejor Dirección (World Cinema) en Sundance, ha triunfado en las categorías de Dirección y Guion (ambas para la debutante Sophie Hyde, quien comparte el segundo premio con Matthew Cormack); por último, la brasileña Reaching for the moon se ha llevado el Premio del Público y el de Mejor Actriz (ex-aequo para Gloria Pires, Tracy Middenforf y Miranda Otto, quien debería haberse llevado el galardón en solitario). Cada una de las triunfadoras refleja una identidad distinta: homosexualidad masculina, transexualidad masculina y homosexualidad femenina, respectivamente. Quizá con intención de redondear el palmarés, una pequeña película italiana sobre transexualidad femenina ha recibido una inesperada Mención Especial: Più buio de mezzanotte. A continuación, dedicaré unas palabras a éstos y el resto de largometrajes de ficción presentados en el festival, ordenados del más flojo al más destacable.

Tiger Orange (Wade Gasque, 2014)
Frankie Valenti deja el porno a un lado para
actuar en Tiger Orange... y gana un premio por ello
20. Yo soy la felicidad de este mundo (Julián Hernández, 2014). Este ejercicio de cine dentro del cine sobre las pasiones despertadas durante el rodaje de un documental de danza ha sido una de las grandes decepciones del festival. Eso sí, en una edición inusualmente casta, sus escenas de sexo explícito no han pasado desapercibidas.

19. Von Mädchen und Pferden (Of girls and horses) (Monika Treut, 2014). Una adolescente problemática es enviada por su madre adoptiva a trabajar en una granja de caballos. Pero lo que podría ser un castigo cargado de aburrimiento se transforma en un regalo al conocer a otra chica que le enseña a disfrutar de la vida lejos de las drogas y en sintonía con  la naturaleza. Lástima que, pese a las bellas imágenes, los bostezos prevalezcan.

18. L’ Armée du Salut (Abdellah Taia, 2013). El prestigioso escritor Abdellah Taia debuta como director en esta cinta autobiográfica sobre las dificultades de crecer en Marruecos siendo homosexual. Aunque honesta y representativa, la película no se atreve a arriesgar lo suficiente para resultar interesante y, al final, se pierde en una trama sin meta alguna empañada por un protagonista impávido con el que resulta imposible identificarse.

52 Tuesdays (Sophie Hyde, 2014)
52 Tuesdays es uno de los mejores reflejos del
cambio de género que ha dado el cine
17. Zwei Mütter (Two Mothers) (Anne Zohra Berrached, 2013). Los problemas y humillaciones afrontados por una pareja lesbiana decidida a adoptar un niño en la Alemania moderna pero arcaica de Merkel son la base de esta historia. El estilo es tan realista que se acerca al documental, pero el interés de la obra se desinfla ante la floja caracterización de las protagonistas.

16. Happy end!? (Petra Clever, 2014). Dos mujeres muy diferentes —responsable estudiante de derecho la primera, temperamental reina del clubbing lésbico la segunda— se embarcan en un alocado viaje que, no sólo las unirá emocionalmente, sino que las ayudará a superar sus propios miedos. Aunque el guion es confuso y la dirección torpe, las buenas intenciones ofrecen un resultado agradable.

15. Più buio de mezzanotte (Sebastiano Rio, 2014). La inquietante nostalgia de Pier Paolo Pasolini y Federico Fellini se apodera de este pequeño film sobre un frágil joven que encuentra refugio en la alocada noche siciliana. Chaperos, prostitutas y travestis se convierten en su nueva familia y le enseñan a madurar con demasiada rapidez. Por desgracia, cuando el espectador empieza a darse cuenta de lo que el film quiere contar, ya es tarde para meterse en su trágica historia.

Tru love (Kate Johnston y Shauna McDonald, 2013)
En Tru Love la diferencie de edad y sexualidad no
impide la creación de una relación especial
14. The Foxy Merkins (Madeleine Olnek, 2014). Dos prostitutas callejeras especializadas en servicios a mujeres de alta sociedad viven extravagantes aventuras cargadas de mordaz ironía. A ratos divertida, a ratos pesada, pero siempre exagerada (para bien y para mal), el film se respalda en sus dos peculiares protagonistas: experimentada y hermosa la una, inexperta y obesa la otra.

13. Velociraptor (Chucho E. Quintero, 2013). El día del fin de mundo, un joven dibujante de cómics decide perder la virginidad antes de que sea tarde y su amigo heterosexual parece la mejor opción. Sustituyendo presupuesto por imaginación, esta comedia apocalíptica mexicana ha sido una de las propuestas más originales del certamen.

12. Boys (Jongens) (Mischa Kamp, 2014). Aunque los holandeses son bastante liberales, pocas cintas lidian con la homosexualidad tan directamente como esta historia sobre dos atletas que descubren la sexualidad y el amor al mismo tiempo durante las vacaciones de verano. Acompañada de canciones emotivas, la película es tierna y honesta, pero no ofrece nada que no hayamos visto antes. Aún así, ha sido bastante bien recibida gracias al sentimiento de libertad que transmite.

Getting Go: the Go Doc Project (Cory Krueckeberg, 2013)
Getting Go: the Go Doc Project muestra el lado
tierno y humano del mundo del erotismo
11. Naomi Campbel (Nicolás Videla y Camila José Donoso, 2013). Esta historia es verdaderamente interesante y sincera gracias a partir de las vivencias reales de la protagonista, una mujer transexual chilena de orígenes indígenas y gitanos. Alternar escenas reales con el inexperto guion da como resultado una obra que, sin ser perfecta, es un digno reflejo de las dificultades de la transexualidad en el mundo contemporáneo.

10. Tru love (Kate Johnston y Shauna McDonald, 2013). El destino une a una madura madre enviudada y una atractiva lesbiana treintañera y, pese a la distancia sexual y generacional que las separa, surge entre ellas una bella amistad cargada de gritos de amor por la vida. El guion no es perfecto y el personaje de la hija está algo manido, pero cuando las dos protagonistas comparten pantalla surge la magia.

9. Getting Go: the Go Doc Project (Cory Krueckeberg, 2013). El punto medio perfecto entre ternura y erotismo es alcanzado por este interesante y creíble falso documental sobre un adorable joven obsesionado con un bailarín go-gó aún más adorable. Buena música, buenos diálogos y buenas interpretaciones acompañan a una obra moderna que rompe con tópicos y prejuicios.

Ang Huling Cha Cha ni Anita (Anita’s Last Cha Cha) (Sigrid Andrea Bernardo, 2013)
La filipina Anita's Last Cha Cha da un tratamiento
desenfadado y mágico de la homosexualidad infantil
8. Ang Huling Cha Cha ni Anita (Anita’s Last Cha Cha) (Sigrid Andrea Bernardo, 2013). Una bella y misteriosa mujer regresa a una apacible zona rural de Filipinas despertando prejuicios, secretos, sonrisas… y el primer amor de una niña de doce años. Mientras ésta vive tiernas aventuras infantiles con sus dos impagables amigos, la mujer se enfrenta a la incomprensión, pero una mágica y danzarina amistad surge entre ambas dispuesta a abrazar valiosos momentos de felicidad.

7. Helicopter Mom (Salomé Breziner, 2014). En la disparatada pero hilarante línea de G.B.F. (Darren Stein, 2013), esta comedia sobre una madre —genial Nia Vardalos, protagonista de Mi gran boda griega (Joel  Zwick, 2002)— empeñada en hacer salir a su confundido hijo del armario ha sido, sin duda, una de las películas más populares del festival. No faltan los tópicos, pero el resultado es demasiado divertido como para echárselos en cara.

Helicopter Mom (Salomé Breziner, 2014)
La divertida Helicopter Mom pone fin a las etiquetas
6. Tiger Orange (Wade Gasque, 2014). En la California profunda, dos hermanos gais largo tiempo desconectados tratan de reconciliarse tras la muerte de su padre. Ambos son demasiado distintos para que la situación mejore por sí sola, pero conforme los recuerdos afloran las barreras entre ambos empiezan a debilitarse. Gran trabajo actoral (a destacar el debut fuera del porno de Frankie Valenti) y buena dirección para una obra algo confusa pero cargada de nostalgia y grandes diálogos.

5. Girltrash: all night long (Alex Martínez Kondracke, 2014). A partir de la popular serie web sobre las aventuras de un grupo de rock femenino llega este divertido musical independiente cargado de humor y estridencia. Aunque el guion no puede ser menos serio, la calidez de las interpretaciones y el amor transmitido hacia la icónica ciudad de L.A. permite disfrutar de un rato agradable y sorprendente. Además, sus fantásticas canciones se graban en la mente.

Girltrash: all night long (Alex Martínez Kondracke, 2014)
Girltrash: all night long cuenta con pegadizas canciones
como "By 2 a.m.", "Finally" o "Fantasy Crush"
4. 52 Tuesdays (Sophie Hyde, 2014). Un año. 52 semanas. 52 martes. 52 ocasiones para que un hombre transexual y su hija adolescente, sumidos ambos en sendas búsquedas de identidad, fortalezcan su relación parental. No faltan los personajes y diálogos que no aportan nada, pero, ¿no es así la vida? Esta pequeña gran película australiana es un viaje de autodescubrimiento sexual y emocional contado de una forma única. Por cierto, esta cinta ganó el Oso de Cristal en el pasado Festival de Berlín, entre otros muchos galardones internacionales.

3. Test (Chris Mason Johnson, 2013). En el San Francisco de 1985 el SIDA se convirtió en una plaga que nadie entendía y en una demonización de la comunidad gay. Un joven bailarín (guapísimo Scott Marlowe) debe decidir si someterse o no a uno de los primeros test mientras traslada sus pasiones a la pista de baile (en escenas verdaderamente fascinantes). Bellísimo film sobre la necesidad de afrontar los miedos y jamás rendirse ante las dificultades de la vida. Y sobre el amor, claro.

Test (Chris Mason Johnson, 2013)
La maravillosa Test utiliza la danza como espejo
del alma y ofrece momentos únicos
2. Reaching for the Moon (Flores raras) (Bruno Barreto, 2014). Una década después de encarnar a Éowyn en El Señor de los Anillos (Peter Jackson, 2001-2003), Miranda Otto se transforma en la poeta Elizabeth Bishop. En el efervescente Río de Janeiro de los 50, florecen sus ideas pero también su crisis existencial, derivada de su adicción al alcohol, sus propias dudas y una confusa relación con la arquitecta Lota de Macedo Soares. Aunque a veces se pierde en sí misma, la película es poética, hermosa y evocadora. Además, su fotografía y banda sonora están entre las mejores del festival.

1. El amor es extraño (Ira Sachs, 2014). La homofobia obliga a una pareja gay en el otoño de la vida a vivir separados justo después de contraer matrimonio en la vital Nueva York. Amigos y conocidos ofrecen su hogar, pero no siempre su comprensión. Alfred Molina, John Lightow y Marisa Tomei encabezan un fantástico reparto muy bien dirigido por el experimentado Ira Sachs, quien deja atrás su dramática Keep the lights on (2012) para acercarse a la comedia, aunque sin dejar de lado la emotividad. Una pequeña joya que inauguró el festival a lo grande fuera de competición.

Love is strange (El amor es extraño) (Ira Sachs, 2014)
La tierna El amor es extraño tiene dos protagonistas
inusuales: dos hombres maduros homosexuales
Aunque son los largometrajes de ficción los que acumulan a la mayoría de los espectadores, este festival también ha ofrecido una rica selección de cortometrajes y documentales que también han sido representados en el palmarés. De los primeros han destacado You’re dead to me, Moiré, Happy and gay, Inside the box, El pastel, Kuhani e Y otro año, perdices, y de los segundos Born this way, Kidnapped for Chris, Mamis, How to survive a plague —nominada al Oscar hace dos años—, Peter de Rome: Grandfather of Gay Porn, Las ventanas abiertas y El viaje de Carla. La protagonista de éste último, la activista transexual Carla Antonelli, protagonizó el momento más especial de la entrega de premios al recordarnos que el cambio de género no es una decisión caprichosa, pues son demasiados los problemas y peligros como para que alguien decidiera dar el paso por mero capricho. Ni la homosexualidad, ni la transexualidad, ni la bisexualidad, ni la intersexualidad, ni ningún otro tipo de sexualidad son nunca un capricho o una elección, sino la necesidad de mantenerse fiel a uno mismo. Cualquiera de los fantásticos títulos presentados en la maravillosa selección del 19º LesGaiCineMad lo demuestran. 

Por cierto, este festival es especial para mí, porque supone mi primera colaboración en la excelente revista digital El Antepenúltimo Mohicano, que os invito a visitar.


© El copyright del texto pertenece exclusivamente a Juan Roures
© El copyright de las imágenes pertenece a sus respectivos autores y/o productoras/distribuidoras

1 comentario:

  1. Tuve la oportunidad de ver películas muy buenas en el festival: la verdad es que Test se disfruta en pantalla grande, ya que las coreografías resultan más impresionantes; Reaching for the moon también es muy recomendable y Jongens tiene la esencia neerlandesa que tanto me gusta.

    The Foxy Merkins sólo la recomendaría a la gente que le guste el humor transgresor estilo Family guy: había gente que se reía (y mucho) en la sala, pero no es mi estilo de humor.

    Espero tener la oportunidad de ver las que me faltan, espécialement Helicopter mom!

    Un artículo muy bueno, se nota el trabajo que te ha llevado tanto de campo como de redacción y selección de imágenes.

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